El Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas (TJCE) ha dictaminado que el programa de pasaportes dorados de Malta es ilegal. Concretamente, la sentencia del 29 de abril concluye que el programa no defiende la integridad de la ciudadanía de la UE.
Según el TJCE, los miembros no pueden vender la ciudadanía de la UE como una mercancía sin un vínculo genuino con el país emisor. En consecuencia, la sentencia afecta a Malta, el último país de la UE que ofrece la ciudadanía por inversión.
Malta Vende la Ciudadanía de la UE
Desde 2014, Malta ha ofrecido la ciudadanía a inversores extranjeros a cambio de aproximadamente 1 millón de euros en contribuciones. A cambio, los beneficiarios obtenían pleno acceso a los derechos de la UE, incluida la libre circulación y el trabajo entre los Estados miembros.
Aunque Malta ganó más de 1.400 millones de euros con el programa, los críticos argumentaron que se aprovechaba de las normas de ciudadanía de la UE. Y lo que es más importante, el gobierno no exigió a los solicitantes que residieran en Malta ni establecieran ningún vínculo a largo plazo. Por ello, el programa se enfrentó a la presión constante de la Comisión Europea.
Sentencia del TJCE sobre Malta
El TJCE subrayó que la ciudadanía debe reflejar una conexión real con el país que la concede. Por ese motivo, el tribunal consideró que el régimen de Malta vulneraba el principio de cooperación leal.
Además, subrayó que vender la ciudadanía debilita la confianza entre los Estados miembros. Aunque el tribunal no impuso sanciones inmediatas, Malta debe ahora ajustar rápidamente su política. En respuesta, los funcionarios malteses se comprometieron a revisar el sistema de acuerdo con las expectativas de la UE.
Reacciones de funcionarios y expertos
Los funcionarios europeos acogieron con satisfacción la decisión, afirmando que reafirma los valores fundamentales de la UE de responsabilidad común y confianza mutua. Mientras tanto, expertos jurídicos señalaron que la sentencia crea un precedente para otros países de la UE que estén considerando programas similares.
En particular, la Comisión Europea dijo que vigilaría de cerca el cumplimiento de Malta en los próximos meses. Por otra parte, las autoridades maltesas insistieron en que el programa había seguido los procedimientos de diligencia debida. Aun así, reconocieron la necesidad de defender el Estado de derecho y proteger la reputación de la UE.
Prisa por superar las restricciones de Malta
A raíz de ello, los agentes de visados dorados están instando a sus clientes a acelerar sus solicitudes antes de que la UE imponga más restricciones. Como consecuencia, ha aumentado la demanda entre los particulares con grandes patrimonios, que temen el cierre definitivo del régimen.
Algunos asesores advirtieron de que los retrasos podrían conllevar mayores costes y una investigación más estricta. Al mismo tiempo, muchos inversores empezaron a explorar rutas alternativas, como el programa de residencia de Portugal. Aun así, Malta sigue siendo la opción preferida por su oferta de ciudadanía por la vía rápida y sus bajos requisitos de residencia.
Implicaciones más amplias en la UE
Evidentemente, la sentencia del TJCE puede afectar a programas similares de migración por motivos de inversión en toda la Unión Europea. Por ejemplo, países como Bulgaria y Chipre ya han suspendido sus programas bajo la presión de la UE.
Así pues, la sentencia podría marcar el inicio de un alejamiento más amplio de la ciudadanía por inversión en Europa. Además, la decisión refleja la creciente preocupación de la UE por la transparencia, la seguridad y la evasión fiscal.
Punto de inflexión para la ciudadanía de la UE
En resumen, el máximo tribunal de la UE ha trazado una línea firme contra la monetización de la ciudadanía. Como consecuencia, Malta se enfrenta ahora al reto de reformar su sistema y, al mismo tiempo, preservar la confianza de los inversores. En última instancia, la sentencia señala una nueva era en la regulación de la ciudadanía y la movilidad dentro de la UE.
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